Don Juan Eugenio Vera Alvarado, fue fiscal por más de treinta años en la comunidad de Nuestra Señora de la Candelaria, correspondiente a la Parroquia de Quellón. Fue un hombre de fe profunda, coherente, y muy dedicado al crecimiento de su comunidad.
El abuelo Queño como lo conocían, fue un hombre que aportó también en otras comunidades, haciendo catequesis, rezando en velorios, en jornada de fiscales, bautizando y compartiendo la vida con la gente, tal cual lo hizo Jesús.
Siempre pidió que al momento de fallecer fuese velado una noche en su casa, y al día siguiente ser trasladado a la Capilla de Candelaria y que se le celebre una misa junto a sus hermanos fiscales. También pidió que se le avise al Obispo de su fallecimiento.
El abuelo Queño partió el día 26 de Junio 2018, a la edad de 105 años, rodeado de amor y cuidados de su esposa, hijos y nietos.
El día 25 de junio el Padre Carlos Cárdenas, junto a don Eudulio Triviño, diacono permanente de la parroquia, fueron hasta su casa donde junto a su familia hicieron oración, cantaron y don Queño recibió la Unción de los enfermos. “Se fue en paz, se fue en silencio, agradecido de Dios, con el amor de su comunidad, que amo a Dios por el ejemplo y testimonio del abuelo Queño”.
- Carlos Cárdenas, párroco de Quellón