La devoción de la religiosidad popular más grande de nuestra Diócesis San Carlos de Ancud reunió una vez más miles de peregrinos en la pequeña Isla de Caguach.
La fiesta a Jesús Nazareno de Caguach, se celebra dos veces al año, su día original el 30 de Agosto, y su celebración de verano desde hace 39 años, que da la oportunidad de que más personas participen debido al mejor clima en la región, cada tercer domingo del mes de Enero, este 2018 el día 21 dónde llegaron cuatro mil personas aproximadamente. Esta devoción empezó cuando Fray Hilario Martínez en el año 1778 trajo la imagen de Jesucristo cargando la cruz camino al calvario.
El Padre Obispo Juan María Agurto, quien venía recién llegando a la isla, después de haber participado en diferentes actividades en el marco de la visita del Papa a Chile, presidió la Eucaristía y expresó “ha sido una significativa manera para nosotros cómo diócesis celebrar este encuentro con el Papa que nos recuerda nuestra fe universal católica, y nosotros hoy día aquí en esta fiesta y junto a tantos hermanos también estamos reafirmando nuestra fe en Él”.
En la sencillez de esta pequeña isla en medio del Pacifico, muchas personas se encuentran con Jesucristo, es una experiencia de fe muy significativa para los peregrinos que de verdad buscan vivir esta fiesta con un sentido profundo de oración, acción de gracias y ruegos a nuestro Padre. Son miles que llegan cada año a pedir, pero también a agradecer los milagros que han recibido para sí mismos, para sus hijos u otros familiares. Así fue cómo en esta ocasión la comunidad de Caguach lo vivió de manera especial, dado que uno de los acólitos y vecino de la localidad, Fernando, un joven de 17 años de edad, debió ser llevado la noche del sábado hasta Achao, para ser internado ya que sufrió una fuerte crisis de epilepsia. Su situación era de gravedad en esas horas, según contó el padre Arturo Mansilla, rector del Santuario de Jesús Nazareno, “fue un verdadero milagro, desde aquí salió inconsciente y a las 11:45 de la noche estábamos terminando la vigilia, donde hicimos oración especialmente por él, tan pronto terminamos el momento de oración a los 5 min recuperó la consciencia, eso es una muestra de que Dios está con él, está con los enfermos”, el sacerdote además deseó que Jesús “el médico de los médicos” pueda sanar completamente a este joven servidor de la comunidad.
Vivencias cómo la del joven Fernando, son inúmeras más que se relatan y cada vez entre los devotos con su fe firme y sencillez de corazón “corre la voz” que el “milagroso de Caguach sí escucha nuestros ruegos”.