En la víspera de la solemnidad de Epifanía, el sábado 5 de enero de 2018 a las 19:00 hrs., falleció a los 91 años de edad don Sergio Contreras Navia, obispo emérito de Temuco, un incansable trabajador por los derechos humanos, la opción preferencial por los pobres, la cercanía a los pueblos originarios y la búsqueda de justicia y paz en la Araucanía. Don Sergio, que en los últimos días se encontraba muy deteriorado de salud, residía en el Hogar “Nuestra Señora del Carmen”, de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, en la capital regional.
El día de sus exequias, cientos de personas llegaron al Templo Catedral de Temuco para despedir a Monseñor Sergio, hombre de Dios, entregado a su pueblo con gran generosidad. Un pastor que se destacó por su amor a Dios, que se veía reflejado en su incansable trabajo por los derechos humanos, la opción preferencial por los más pobres, por su cercanía a los pueblos originarios y la constante búsqueda de la verdad y la justicia. Un Pastor que se esforzó por hacer realidad en su vida su lema episcopal: “No he venido a ser servido, sino a servir”.
En el marco del acto penitencial, algunos hermanos del pueblo mapuche presentaron a Dios sus oraciones, en su lengua y según su costumbre.
Monseñor Héctor Vargas, en su homilía, señaló “Quisiéramos rendir un sentido homenaje, a uno de los signos del amor de Dios por esta Iglesia servidora de esta bendita tierra de La Araucanía y su gente. Me refiero a Monseñor Sergio Contreras Navia, quien desde la tarde del sábado se encuentra estrenado la vida nueva del resucitado… El Señor quiso llamarlo al lugar de los hombres justos y buenos, en las Vísperas de la Solemnidad de la Epifanía del Señor. Desde la fe, creemos que no es una casualidad, ya que el significado de esta fiesta, ofrece elementos que nos permiten entender el tipo de Pastor que fue don Sergio”. “Don Sergio se destacaba por ser un hombre intelectualmente brillante, lo que hacía conmover hasta sus más enconados adversarios, era su auténtica humildad evangélica. La austeridad que predicaba, la vivía en profundidad”.
Como signo de despedida de nuestra ciudad y de la diócesis en general, se realizó una procesión en sagrado silencio, por los alrededores de la Plaza de Armas. Momento muy especial, que fue acompañada de cientos de personas que se detuvieron para dar el último adiós a este querido pastor. Finalmente, tras retornar al Templo Catedral, el obispo inciensa y rocía el cuerpo con el agua bendita, mientras el Coro Cantaba la antífona: “He venido a servir y…”. Luego el féretro fue bajado a la Cripta, donde además descansan los restos de Monseñor Prudencio Contardo, primer obispo de la Diócesis y Monseñor Menchaca Lira.
Pequeña reseña de su vida:
Don Sergio Contreras Navia
Nació en Valparaíso el 27 de Abril de 1926, hijo de Manuel Contreras y Carmen Navia. Ingeniero de la Universidad Técnica Federico Santa María, de donde egresó en el año 1950, con su memoria “Bombas axiales de paletas”, que le significó ser distinguido por el Colegio de Ingenieros de la época, por el mejor trabajo de título de ingeniería. Esta formación le ayudaría más tarde en su misión pastoral.
Estudió en el Seminario de Santiago y en la Facultad de Teología de la Universidad Católica de Chile. Licenciado en Teología y en Filosofía. Fue asesor diocesano de Universitarios Católicos entre los años 1957 y 1963, año en que comenzó su trabajo diocesano con la Juventud Obrera Católica (JOC), hasta el año 1966. También fue asesor nacional de la JOC y vice asesor nacional de la Acción Católica Cristiana.
A los nueve años de su ordenación sacerdotal fue elegido obispo de Ancud por el Papa Pablo VI, el 21 de noviembre de 1966. Fue consagrado obispo en la catedral de Valparaíso el 27 de diciembre del mismo año, por monseñor Emilio Tagle. Tomó posesión de la diócesis el 14 de enero de 1967, sucediendo a monseñor Alejandro Durán, cuando éste fue trasladado a Los Ángeles.
Celebró el V Sínodo Diocesano de Ancud en 1968 y en esa diócesis, además del legado espiritual, dejó la Casa de Retiro “Estrella del mar”, en Castro, donde se forman agentes pastorales.
Fue Obispo Auxiliar en Concepción, entre 1974 y 1977.
Lo trasladaron a la diócesis de Temuco el 28 de diciembre de 1977 en reemplazo de monseñor Bernardino Piñera.
Tomó posesión el 15 de enero de 1978 y estuvo hasta el 3 de noviembre de 2001, cuando entregó su cargo a Monseñor Manuel Camilo Vial.
Entre las muchas actividades que marcan su vida consagrada, está su participación en los sínodos de obispos de 1971 y 1974 y ser secretario de la Conferencia Episcopal, al mismo tiempo que era obispo de esta zona.
Fue él quien impulsó el apostolado de los laicos y la promoción humana y cristiana de los más desposeídos. Se preocupó de los derechos humanos, manteniendo un comité de solidaridad. Bajo su gestión se reconstruyó la Iglesia Catedral, destruida por el terremoto de 1960 y la primera piedra la puso el 19 de marzo de 1981, día de San José. Numerosos feligreses cooperaron con él y trabajaron arduamente para que el templo estuviera listo para la visita de Juan Pablo II.
Fue el sexto obispo de Temuco y el viernes 14 de septiembre de 2007 celebró sus Bodas de Oro como sacerdote, en una hermosa ceremonia en la Catedral, presidida por el clero diocesano.
Entre las variadas tareas que desempeñó siendo obispo emérito, le correspondió ser Presidente de Caritas Chile entre los años 2003 y 2006.
De familia muy católica, Monseñor Sergio Contreras sintió su vocación siendo estudiante.
“Sin embargo, mis asesores espirituales no me dejaron partir al seminario inmediatamente, sino que me recomendaron concluir mi carrera. De hecho, cuando me titulé, vine a recibir mi certificado con sotana”, declaró durante una visita que realizó a su universidad en el año 2004.
Fue requerido por comunidades mapuches para mediar en distintas situaciones y el 21 de octubre de 2001, cuando visitó la Intendencia de la Novena Región para despedirse de las autoridades de Gobierno, ya que dejaba el cargo el 3 de noviembre, indicó que el tema indígena fue una de las materias más importantes de su gestión y en ese entonces destacó que aún quedaba mucho por hacer, por no ser un problema que se solucionaría en el corto plazo. Así, instó a todas las partes a buscar los puntos en común para resolver este conflicto.
Monseñor Sergio Contreras Navia, obispo emérito que dirigió la Diócesis San José por 23 años, pasó sus últimos años en el Hogar de Ancianos Nuestra Señora del Carmen, bajo el cuidado de las religiosas.
• 23 años dirigió la Diócesis San José. Fue el sexto obispo en la capital regional.
• 46 sacerdotes fueron ordenados durante la administración de monseñor Contreras.
• 200 capillas fueron creadas durante su gestión, gracias a su trabajo por formar y organizar comunidades en distintos sectores.
Falleció en Temuco el 5 de enero de 2019.
TESTIMONIOS
Monseñor Juan María Agurto, Obispo Ancud
Donde Monseñor Sergio Contreras estuvo durante varios años ejerciendo como obispo. En realidad allá él fue su primera Diócesis, entre el año 1966 hasta 1974, estuvo sirviendo allá y luego fue trasladado a otras Diócesis y también acá a Temuco. He venido a hacerme presente en este momento como signo de comunión de Iglesia, acompañando a un hermano que ha llegado a la meta, después que ha servido al Señor no sólo en el servicio activo episcopal sino también como Obispo, ofreciendo la enfermedad, el sufrimiento, la ancianidad que todos sabemos que ha pasado durante varios años. Así que venimos a agradecerle a Dios también que le ha dado el don de la Fe a Monseñor Don Sergio y recordarlo junto agradecidamente con mucha gente allá de Chiloé. Yo hace 17 años que estoy allá en Chiloé y en varios lugares se recuerdan de él.
Fredy Villanueva
Quisiera hoy día dar testimonio de lo que Don Sergio fue para muchos de nosotros en un período oscuro de nuestra historia. Estuvo a nuestro lado, fue nuestra salvación y fue nuestra voz.
Carlos Melo
Conocí a Don Sergio, Monseñor y doy gracias a Dios por el tiempo que lo conocí, que estuvo con nosotros y yo digo que fue un gran formador de formadores y nos acompañó mucho y sobre todo trabajó para el Pueblo Mapuche.
Carlos Oliva Troncoso (Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos de La Araucanía)
Nosotros como familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos, naturalmente nos llega muy profundamente el fallecimiento del Obispo Contreras, porque fundamentalmente por la labor que desarrolló él mientras estuvo acá en la Diócesis, sobre todo en los años más difíciles de la Dictadura, donde se nos cerraron muchas puertas a nosotros y hay que decirlo también, un sector de la Iglesia, no toda la Iglesia Católica, un sector de la Iglesia nos acogió, en todo el país, el ejemplo claro está la Vicaría, pero acá también hubo una Vicaría, también estuvo la Pastoral Social que nos acogió, incluso nos acogió en su sede, en el Obispado, ahí funcionamos nosotros algún tiempo, por lo tanto nosotros desde ese punto de vista, independientemente de que creamos o no creamos, de que algunas personas de la Agrupación no pertenecíamos a la Iglesia, no creemos, pero indudablemente aquí hay un gesto humano de reconocimiento y eso nosotros los familiares lo tenemos claro y no nos perdemos en eso. Por eso es que quisiéramos entregar nuestras condolencias, nuestro pesar y nuestro acompañamiento a ese sector de la Iglesia, que siempre ha estado cercano al dolor, al sufrimiento y en este caso de los Familiares de los Detenidos Desaparecidos.
Raúl Caamaño Matamala (Profesor Universidad Católica de Temuco)
Decir de Monseñor que fue luz y será luz para toda La Araucanía, particularmente para los mapuches, para los pobres. El fue un pastor, un pastor de su Iglesia, no sólo a nivel regional, sino para todo nuestro país.
Monseñor Francisco Stegmeier, Obispo de Villarrica
Yo, a Don Sergio Contreras no lo conocí siendo él obispo de Temuco, sino que cuando ya estaba emérito. Lo conocí en el Hogar donde él vivió tanto tiempo y también donde falleció, y la verdad es que me impresionó siempre su actitud tan deferente, respetuosa, tan humilde y sobre todo cuando yo logré conversar con él, lo vi tan lúcido, tan sabio en sus opiniones respecto a la situación de la Región y también de la Iglesia, así que realmente la impresión que me dejó siempre él fue de un hombre de Dios, un hombre muy entregado a su ministerio sacerdotal primero, después episcopal y un hombre que quería mucho a su pueblo, a la Iglesia y a la Región.
Arturo Hernández Sallés (Vicerrector de Extensión y Relaciones Internacionales de la UCT)
Bueno, qué decir, una sensible pérdida, de un valiente, de una persona que dio toda su vida al servicio de la comunidad, particularmente de los más desposeídos. Recuerdo muy bien el tema del campesinado y el tema de los mapuche, que él lo puso de relevancia y lo dignificó, como queda constancia en su Carta Pastoral de los Obispos del Sur, que él lideró y respecto de la Universidad, bueno él es el responsable de la creación de la actual Universidad Católica de Temuco en el año 1991, con todo el servicio que esa Institución puede prestar al futuro, por lo tanto, era un hombre claramente visionario y cumplió perfectamente su lema episcopal.
Carmen Barra
Trabajé con Monseñor Sergio Contreras durante los 23 años que estuvo él acá, pero total en el Obispado estuve como 38 años más o menos.
Sinceramente para mí, fue mi mejor jefe, el mejor padre, el mejor pastor, un hombre muy sencillo, un hombre muy amable en su interior, muy acogedor, yo como dije, para mí fue el mejor jefe, el mejor pastor espiritual y el mejor sacerdote que ha tenido la Diócesis.
Fernando Trujillo (Director Coro Catedral de Temuco)
Emocionante, un privilegio acompañar a Don Sergio en este momento, un día histórico para la Diócesis también, su legado, su presencia, todo aquello lo llevamos en el corazón y como se ha dicho en tantas misas lindas en estos días, que lo hemos velado aquí en la Catedral, podamos todos los laicos e Iglesia, seguir su ejemplo, principalmente en su dirección de la Iglesia.
Eugenio Tuma (Ex Senador de La Araucanía)
La verdad es que es un hito muy importante para la Región de La Araucanía, despedir a un hombre que colaboró tanto en la defensa de los Derechos Humanos, especialmente en un período en que había una restricción a la libertad y una dictadura muy dura contra de gente que discrepaba de ese Gobierno y este Pastor de la Iglesia fue que se la jugó por defender esos Derechos aquí en La Araucanía.
Monseñor Manuel Camilo Vial, ex Obispo de Temuco
Bueno, estoy por un lado triste por la partida de Don Sergio, pero feliz porque fue un hombre con una vocación muy grande desde joven y que llegó a ser Obispo en esta Diócesis, en la cual estuvo 23 años sirviendo con un corazón muy grande, con mucha clarividencia viendo los grandes problemas, muy cerca de la gente, lo vimos en todas esas comunidades que se constituyeron con él, que pudieron hacer sus templos, que pudieron formar sus comunidades. Todo el trabajo que hizo en el mundo mapuche y yo creo que él descubrió lo esencial del trabajo, conocer, dignificar a este pueblo que habita en medio de nosotros y con el cual a veces hemos sido muy injustos, hemos tratado muy mal. Hoy día es un reconocimiento a toda esa entrega; era un hombre que en la Conferencia Episcopal tenía mucha influencia porque era gran persona, porque era un hombre de mucha sabiduría y también muy solidario. Es muy lindo el trabajo social que se realizó aquí en la Diócesis con él, en el Departamento de Acción Social, que ha tenido una influencia muy grande, histórica aquí en la Novena Región. Yo lo recuerdo con mucho cariño porque fue muy amigo, fue muy fraternal conmigo, muy respetuoso y yo aprendí mucho de él, entonces lo hecho muchísimo de menos, pero ya tenemos que partir de esta vida.
Fuente: Comunicaciones Diócesis de Temuco