En un clima de agradecimiento por los años de servicio, las comunidades de la Parroquia San Juan Pablo II, despiden al Padre Edito Rain y lo acompañan a su nueva Parroquia de Chonchi.
El pasado domingo 24 de Febrero, el P. Edito Rain asumió como párroco la Parroquia San Carlos de Chonchi, en una alegre Eucaristía, presidida por el Obispo Juan María Agurto, dónde participaron las comunidades de su antigua parroquia San Juan Pablo II y las comunidades de Chonchi.
La ceremonia fue acompañada por una gran cantidad de fieles, muchos de ellos en caravana desde Castro hasta Chonchi, también se celebró anteriormente su despedida en la Iglesia Virgen de Gracia, dónde recibió muchas manifestaciones de cariño.
Testimonios
Recuerdo la primera vez que hablé con el padre, me fui a presentar porque yo estaba a cargo del área social en Virgen de Gracia, fue una conversación muy cariñosa a pesar de que no nos conocíamos, muy amable, con disposición de tiempo, abierto a las ideas, eso me gustó mucho. El tiempo que dedicaba a escuchar, después en el plano más personal el gran don de escuchar, la disposición en los horarios, uno lo podía llamar en cualquier horario y ahí estaba contestando, visitando a un enfermo, en una adoración al Santísimo, en la Eucaristía, siempre el mismo hombre sencillo y con disposición a escuchar. Mirna Mansilla
Puedo decir que el Padre Edito, es un gran servidor del Señor, sencillo, amigo, humano, un excelente guía espiritual, como se dice “el curita del pueblo”. El padre siempre estuvo a disposición del que más necesitó, mi experiencia personal fue el apoyo espiritual que tuve cuando diagnosticaron a mi hija con cáncer, además fue él quien me motivó a ser catequista de su parroquia, yo pertenecía a otra parroquia pero al experimentar el apoyo del padre me cambié a Nercón. Gracias por toda su entrega, y éxito en su nueva parroquia, que Dios lo siga guiando. Gladys Haro Díaz, catequista de confirmación.
Su transparencia, su humildad, muy sencillo demasiado a veces, siempre disponible a escucharte y ayudarte, a nadie le decía que no; se las arreglaba de alguna manera. Así el Padre Obispo debería inculcarle a los otros sacerdotes ese ejemplo a seguir. Personalmente una bendición y apoyo cuando perdí a mi madre en un trágico accidente y posterior fallecimiento de mi padre, ahí estuvo y va seguir siempre, porque no perderemos el contacto. Elizabeth del Carmen Aguilar Hernández, patrona Capilla de Rauco.
El Padre Edito, en los años que estuvo en la parroquia fue un gran servidor de Dios, cercano a todas las comunidades, no importaba la hora que era o el día, para los sacramentos, respetuoso de las tradiciones y fiestas religiosas de cada comunidad, un sacerdote debe acomodarse a la comunidad, no la comunidad al sacerdote, Edito Rain un gran amigo, sencillo y humilde, dejó la vara muy alta, en estos tiempos donde la Iglesia está herida, él supo mantener el rebaño, soy Pedro Coñuecar y es mi opinión de un gran párroco. Pedro Coñuecar, músico que acompañaba al padre en las diferentes comunidades.
La partida del padre Edito nos tomó de sorpresa, un sacerdote muy humilde y querendón con todas las personas, “él es muy de piel”; lo vi crecer como persona, como sacerdote, ya que cuando él llegó a nuestra parroquia tenía recién 5 años de vida consagrada, y ahora ya han pasado 10 años de que está con nosotros, también como matrimonio, en estos años hemos trabajado juntos, también con mi esposo en la catequesis, en nuestra familia el Padre ha estado con nosotros en las buenas y en las malas, ya que como en toda familia siempre hay diferencias, pero con la sabiduría y el apoyo del padre Edito, hemos podido superar. Es probable que el Señor lo haya llamado a servir en otra comunidad y como matrimonio cristiano esperamos confiados que Dios y nuestra Madre Santísima, lo sigan acompañando para continuar con humildad cumpliendo su misión. Anita Ávila, catequista, sacristana, ministra de la comunión.